lunes, 14 de abril de 2014

Lo objetivo

Quien cree saberlo todo o casi todo difícilmente podrá ser objetivo. Creer que uno lo sabe todo puede ser un obstáculo para aprender cosas nuevas. Es más, aquello que ya uno tiene por sabido, puede, incluso, distorsionar la idea de lo que se observa. Porque es tendencia de uno fijarse y prestar atención a aquellos detalles que le son más familiares. Esto podría llegar a imposibilitarte reconocer cualquier matiz nuevo. Cabe decir, por tanto, que la mejor manera de conocer algo objetivamente es dar por no conocido aquello que se mira.